Artesanías

26.09.2012 22:44

Las artesanías, en cualquier lugar, expresan realmente los valores de la sociedad y la singularidad cultural de una nación. Mientras que en todo el mundo occidental industrial los artículos producidos en masa sustituyen a las artesanías, en México miles de artesanos  perpetúan las tradiciones que aprendieron de sus antepasados. Esto refleja no sólo un profundo aprecio por la tradición, pero también la necesidad de crear “objetos mexicanos” que se ajustan a las necesidades cotidianas, y que permiten la supervivencia durante periodos de dificultades económicas. En México, todavía es más razonable regatear mercado diario al aire libre el precio de una olla de barro hecha a mano, que comprar una olla de acero inoxidable en un supermercado urbano.

    La agencia de gobierno, El Fondo Nacional de Artesanías (FONART), promueve la supervivencia de las artes regionales con temas tales como “El arte popular es patrimonio cultural de México. Es y seguirá siendo, un gran éxito mientras la demanda de los locales y los turistas se cumplan, porque la mayoría de los productos de esta industria artesanal están destinadas al mercado local. De esa manera, un huacal, un portabebés totonaca de la región de la Huasteca , puede ser reutilizado como un práctico anaquel para revistas o convertirse en una interesante “pieza de conversación” en la casa de un turista.

    Esta creatividad exuberante a menudo desdibuja la línea ya difusa frontera entre la artesanía y el arte fino. La práctica repetitiva de toda la vida de hacer formas, diseños y patrones tradicionales profundiza la habilidad del artesano y le permite dar rienda suelta a sus fuerzas creativas.